Se ha presentado en Benicàssim el FIB 2018, en una rueda de prensa en la que han participado Javier Moliner, el presidente de la Diputación de Castellón; Susanna Marqués, la alcaldesa de Benicàssim y Francesc Colomer, Secretario Autonómico de Turismo. Por parte de la organización del Festival ha estado presente Melvin Benn, CEO de Maraworld. Todos ellos han resaltado la importancia que ha tiene el Festival Internacional de Benicàssim para la provincia, desde que comenzó a celebrarse en 1995, hace ya 24 años.
Las expectativas para esta edición son de reunir cada uno de los días a 40.000 personas, aunque las cifras reales podrían acercarse más a los 50.000 visitantes cada día. Como novedad, el CEO de Maraworld ha comentado que los algo más de 1.000 invitados al Festival, incluyendo los acreditados por los medios de comunicación, tendrán que aportar 10 euros, que serán destinados a varias ONGs. De esta manera, el festival se convierte en un evento que no solo es musical, sino que además se convierte en solidario.
Benn ha bromeado con la situación política de su país, que se dirige hacia el Brexit, pero también con la situación de la selección alemana de futbol por su situación en el Mundial de Rusia. Entre el ambiente distendido, también ha querido agradecer a las instituciones, ayuntamiento, diputación y Generalitat Valenciana, su apoyo para seguir realizando este festival año tras año, trabajando coordinadamente « pese a tratarse de partidos políticos diferentes« .